El Drogas en la sala Impala de Córdoba | 15 Febrero de 2025
⦿ El Drogas hace un intenso y profundo repaso a su carrera musical en la sala Impala de Córdoba.
Anoche la Sala Impala de Córdoba se convirtió en un auténtico santuario del Rock nacional, aunque el aforo no alcanzó la plenitud de otras ocasiones. Sin embargo, eso no impidió que la energía y la pasión se desbordaran en cada rincón del local. El Drogas, el inconfundible Enrique Villarreal, subió al escenario como un verdadero titán del Rock, listo para ofrecer un espectáculo que quedaría grabado en la memoria de los presentes.
Pasadas las 22:30 horas, las luces se apagaron y un murmullo de expectación recorrió la sala. Con su característico estilo desenfadado y su voz rasgada, El Drogas comenzó a repasar su trayectoria musical, llevando a los asistentes en un viaje sonoro que abarcó desde sus inicios hasta su nueva etapa en 2025. Aunque el público no llenó la sala como en otras ocasiones, los que estaban allí eran auténticos devotos, dispuestos a entregarse por completo a la experiencia.
Desde el primer acorde, la atmósfera se cargó de electricidad. Temas emblemáticos resonaron en la sala (Mientras arde tupáis, En Punto Muerto, Problemas, Así, Peineta y Mantilla, Víctima, Nada Sin Ti, Cordones de Mimbre, Salvaje Mirar….) y con cada riff de guitarra y cada golpe de batería parecían invocar a los espíritus del Rock. La conexión entre El Drogas y su público fue palpable; cada letra era cantada a viva voz, cada solo de guitarra aclamado con fervor. La entrega de los asistentes era total, como si cada uno de ellos estuviera allí para compensar la falta de los espacios vacíos.
Durante más de dos horas, el espectáculo se convirtió en una celebración del Rock en su forma más pura. El Drogas, con su carisma inigualable, no solo interpretó sus canciones, sino que también hizo algunas adaptaciones como la mítica «Frio» de Alarma y también compartió algunas anécdotas y reflexiones que resonaron profundamente en el corazón de los fans. La sala vibraba con cada nota, y aunque el aforo no fue el esperado, la intensidad del momento hizo que cada rincón se sintiera lleno.
El cierre del concierto fue apoteósico. Con los temas que todos esperaban «En Blanco y Negro, Oveja Negra, No Hay Tregua» y «Esta Noche», que ponía el punto y final en una sala que estalló en un clamor de aplausos y vítores. El Drogas, con una sonrisa de satisfacción, se despidió de su público, dejando una estela de Rock y emoción en el aire. A pesar de que la sala no estaba a rebosar, el espíritu del Rock se sintió más fuerte que nunca.
El Drogas junto a su banda nos regalo una noche memorable en la Sala Impala, donde la música y la pasión se unieron en un abrazo eterno. Y nos demostró una vez más que, sin importar la cantidad de público, que la entrega y el amor por la música siempre serán los verdaderos protagonistas.
Patrocinado Por:
