Rozalén – en la 39 edición del Festival de La Guitarra de Córdoba – 7 Julio de 2019
Rozalén «Cuando El Río Suena…»
Rozalén anoche en la que fue su primera visita al Teatro de La Axerquía y por primera vez también en el Festival de la Guitarra de Córdoba, no pudo hacerlo mejor, puso sin duda en esta jornada del festival y probablemente en todo lo que queda de esta edición, todo el buen rollo, la elegancia, el saber hacer y desprendiendo simpatía a raudales, creando en el ambiente un estado de magia y conexión total con el publico, creando mucho mas de lo que se puede esperar de un concierto.
Con mas de 3000 fans entregados y seducidos desde el primer momento, no perdían detalle de todo lo que pasaba en el escenario y pendientes a cada palabra que Rozalén cantaba y hablaba, contando la historia de cada canción basada en vivencias personales y familiares, poniendo música y voz a las historias sobre su tierra y su familia que le contaba su abuela.
Imposible no aplaudir y no ponerse en pie a cada canción que Rozalén nos iba desgranado, cantando y explicando, toda una fiesta para el publico que cantaban todas las canciones y no paraban de aplaudir canción tras canción y fiesta también sobre el escenario una banda en la que se nota el buen rollo entre ellos, interactuando todos los músicos entre ellos, con graciosas y simpáticas coreografías, coros y duetos.
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Ademas de presentarnos canciones de su disco «Cuando El Río Suena» : La Puerta Violeta, El Hijo De La Abuela, Antes De Verte, Girasoles… también sonaron temas de sus discos anteriores: «Quien Me Ha Visto y Quien Me Ve»: «Asuntos Pendientes, Me Arrepiento, Será Mejor…» y de su primer disco: «Con Derecho A…»: 80 veces, Bajar del mundo, Las hadas existen…Sin olvidar sus grandes adaptaciones que no pasaron desapercibidas de La Llorona de Chavela Vargas que interpretó sin la banda, solo ella con su guitarra y La Belleza de Luis Eduardo Aute.
En el escenario de La Axerquía, Rozalén estuvo acompañada por: Beatriz Romero (intérprete de lengua de signos), Ismael Guijarro (guitarra y percusión), Samuel Vidal (guitarra), Goyo García (bajo), Oliver Martín (guitarra eléctrica), Tete Moragón (batería) y Álvaro Gandul (acordeón).
Sin olvidar la personalidad de Rozalén cantautora y compositora, que es una de las artistas más personales y auténticas del Pop español y sobre todo una mujer muy reivindicativa, caracterizada por su importante activismo social, defendiendo con su música los derechos de las minorías y comunidades más desfavorecidas.
«Cuando El Río Suena» es el tercer álbum y el más personal de Rozalen, un disco que sin duda va a durar mucho en el tiempo, mucho mas allá de modas y listas de ventas, ya que no es un simple disco, es un disco con un concepto bien claro, en el que cada canción cuenta, contando una historia de principio a fin.
Un disco que tiene como temas centrales el feminismo (La puerta violeta), el empoderamiento (Tu nombre), la memoria histórica (Justo, el hermano mayor de su abuela, desaparecido en la Guerra Civil), el celibato (Amor prohibido), la crisis de los refugiados (El hijo de la abuela), el amor (Antes de verte, un dueto con el artista argentino Kevin Johansen) y el desamor (La que baila para ti). Piezas con las que rejuvenece la canción de autor, gracias a su naturalidad y a su gran capacidad para contar historias tan personales que acaban siendo universales.
En la parte musical, Rozalén colabora de nuevo con Ismael Guijarro en la producción. Se trata de un trabajo ecléctico en el que tienen cabida desde el pop hasta el folk, pasando por la ranchera, una habanera y hasta el drum and bass. Como ella dice “es multicultural, sin prejuicios ni etiquetas”. El álbum incluye una versión de Volver a los 17, el clásico de Violeta Parra, “una de las autoras que más admiro y una de las canciones que más disfruto cantando, porque no hay que dejar de cantar las grandes canciones de la historia, para que no se pierdan”, afirma.
María Rozalén estudió Psicología en la Universidad de Murcia y tiene un máster en Musicoterapia. Desde muy pequeña cantaba las canciones que aprendía de su madre y su abuela, y desde los 7 años tocaba la guitarra y la bandurria en una rondalla de Albacete. Empezó a componer canciones a los 14 años, dio su primer concierto como cantautora a los 16 y desde entonces ya no ha parado de hacer ninguna de esas dos cosas. Su activismo frente a la desigualdad y las barreras sociales la ha llevado a actuar en todos sus conciertos acompañada por Beatriz Romero, intérprete de lengua de signos, de manera que su música se dirige a todo el mundo sin exclusiones. Por otro lado, el impacto de su trabajo hace ya tiempo que ha trascendido las fronteras de España, como lo demuestra la gira Cuando el río suena… y sus actuaciones en Argentina, Colombia, México, Perú, Chile…